Hace 100 años
20 de agosto de 1917
Primera Guerra Mundial
Passchendaele: la Colina 70 y Langemarck
El infierno de Passchendaele se reactiva a mediados de agosto, luego de
la pausa a que fueron obligados los británicos y sus aliados, a causa del
clima, durante el agosto más lluvioso en años. El 15 de agosto, tropas del
“Canadian Expeditionary Force” (“CEF”, “Cuerpo Expedicionario Canadiense”),
atacan hacia Lens, ciudad francesa ocupada por Alemania desde 1914, en una
acción subsidiaria de la Batalla de Passchendaele. Uno de los objetivos de
atacar sobre Lens era aumentar la presión sobre las líneas alemanas y evitar
que los defensores pudieran enviar refuerzos hacia el sector de la ofensiva
principal británica. El choque de los días siguientes pasó a ser conocido como
“Batalla de la Colina 70”, por la denominación dada en los mapas militares a
una elevación de terreno que dominaba la ciudad.
En junio de 1917, el CEF había sido puesto bajo el mando del general
Arthur Currie, el primer oficial, nacido en Canadá, en comandar una unidad
militar de esta importancia en el Imperio Británico. El general Douglas Haig,
comandante de las tropas destacadas en Francia por Gran Bretaña y sus dominios,
había ordenado un ataque directo contra la ciudad, pero Currie se dio cuenta de
que sería una costosa carnicería. El canadiense convenció a sus superiores de
que sería mejor capturar la colina. Si conseguían su objetivo, los alemanes se
verían obligados a contraatacar y serían éstos, no los canadienses, quienes se
desgastarían en la ofensiva. El ataque inicial canadiense fue un éxito y
consiguieron capturar la colina el mismo 15 de agosto. En los siguientes días,
los canadienses rechazaron 21 intentos alemanes de recapturar la posición, que
incluyeron el uso de lanzallamas y del llamado “gas mostaza”, un agente químico
altamente tóxico, que ataca la piel, otras zonas expuestas (como los ojos) y la
mucosa digestiva y respiratoria.
La lucha en torno a Lens fue feroz, con 9.000 bajas canadienses y más de
25.000 alemanes muertos o heridos hasta el 25 de agosto. Se puede considerar
que fue una victoria local de la Entente, al conseguir empujar a los alemanes
fuera de una importante posición defensiva, pero los canadienses no
consiguieron conquistar Lens en 1917. Sí consiguieron el objetivo de distraer
tropas y recursos alemanes que, de otro modo, pudieron haberse enviarse como
refuerzo a la zona de Passchendaele propiamente tal, donde se desarrollaba, al
mismo tiempo, una acción que sería conocida como Batalla de Langemarck.
La Batalla de Langemarck fue el tercer gran ataque general, dentro del
contexto mayor de la Tercera Batalla de Ypres, también conocida como Batalla de
Passchendaele. A las 4.45 horas del 16 de agosto, ocho divisiones británicas
atacaron las posiciones alemanas situadas en torno al camino Ypres-Menin, al
norte de la villa de Langemarck. En su flanco norte, tropas del 1er Ejército
Francés también atacaron, en apoyo de la acción principal. Las primeras horas
fueron promisorias para los atacantes, que abrumaron a los alemanes con su
fuego de artillería y superioridad numérica. Sin embargo, muy pronto la lucha
se volvió indecisa por la resistencia de los reductos alemanes, el preciso
fuego de artillería defensivo alemán, decididos contraataques germanos y, sobre
todo, el mar de barro y cráteres, causado por las lluvias incesantes y por la
propia acción de los cañones, que impedía cualquier avance rápido. Incluso los
tanques solían quedarse atascados en el fango o enterrados en los cráteres
abiertos por la artillería y llenos de agua de lluvia.
En el sector sur de la batalla, las tropas británicas perdieron miles de
hombres y consiguieron avanzar apenas unos pocos cientos de metros. En el
norte, los británicos pudieron conquistar la villa de Langemarck, reducida a
ruinas, que dio su nombre a la batalla. Los franceses fueron más exitosos, pero
finalmente contraataques alemanes en otros sectores volvieron infructuosos los
avances de la Entente.
La imagen de abajo, tomada en Ypres en 1917, muestra los efectos del
barro y la lluvia en el avance de los británicos. Los soldados de la fotografía
intentan sacar de una trampa de barro un carro que lleva agua y a uno de los
caballos del tiro, que también está semienterrado.
Imagen tomada de http://ww1photos.com/images/Animals/Page2/Battle_Of_Ypres_1917_A_Water-Cart_Stuck_In_Mud.jpg
No hay comentarios:
Publicar un comentario