En ese momento, simplemente no tenía ganas de escribir más, ni de algunas otras cosas. Una de las personas que me posteó entonces, se convirtió en mi polola pocas semanas después y, antes de dos años, nos jurábamos amor eterno en el único lugar donde tiene sentido plantear cosas eternas: ante Dios.
En el camino, muchas cosas pasaron, el terremoto del 2010 nos dejó casi en la calle, una de nuestros hijos no llegó hasta nuestros brazos, mis papás están ya en los del padre y he tenido que abandonar una de mis pasiones, la historia, por los tumbos que ha dado la vida.
Vuelvo a este espacio, más que nada, buscando la catarsis que significa dialogar con el teclado del computador de temas, como las humanidades, que le importan a bien poca gente. Si alguien me lee, fantástico, gracias. Si no, se cumple el propósito de sacar ideas que, de otra forma, se quedan solamente en la cabeza de uno.
Partiré subiendo escritos de algunos meses, subidos a Facebook y guardados por ahí, sobre todo, relacionados con la conmemoración, en estos años, de los 100 años de la Primera Guerra Mundial y los 75 años de la Segunda Guerra Mundial. Y algunas otras cosas también.
Hola de nuevo, blogósfera. Como McArthur a las Filipinas, he vuelto.
En la imagen, el momeno en que el célebre general regresa a las playas del archipiélago, dos años después de tener que retirarse, perseguido por las tropas imperiales japonesas, ahora puestas a la defensiva por el "US Army".
Imagen tomada de https://todayinphilhistory.files.wordpress.com/2010/10/macarthurleyte.jpg
Bravo!!! Quedo atenta a los siguientes post. Me parece muy bien que le haya hecho caso a su señora. Je je je besos
ResponderEliminarElla